La pandemia de Covid 19, así como el Aislamiento Social Preventivo Obligatorio y el Distanciamiento Social Preventivo Obligatorio han obligado a las comunidades a re pensarse y organizarse ante esta catástrofe sanitaria mundial.
En tal sentido, en el proceso de contención de los contagios se instrumentaron diversos tipos de políticas para coadyuvar a la ciudadanía, desde aquellos que dependen de los diferentes programas de contención del Estado, así como la habilitación de canales de financiación de los que vieron disminuidos sus ingresos por la imposibilidad de trabajar o cumplir con su relación de dependencia.
En muchos casos, gran parte de las políticas públicas diseñadas y estructuradas por los gobiernos (nacional, provincial y municipal) fueron consensuadas y puestas en funcionamiento junto a instituciones y organizaciones civiles, por ser quiénes se encuentran en relación directa con los vecinos y vecinas.
En el campo cultural podemos observar que las actividades vinculadas al sector fueron las primeras en suspenderse. En nuestro caso puntual debemos sumar al retraimiento económico común a todas las actividades en este período de pandemia, la precarización laboral en la que se desempeñan las personas que han elegido distintas disciplinas artísticas como profesión.
Contemplando el aporte que la Industria Cultural realiza a la economía nacional, pautado en un 2.6 % del movimiento global, según datos aportados por el INDEC, consideramos que aun desde una visión meramente materialista, quienes creamos bienes simbólicos y nutrimos la identidad nacional y regional con nuestras producciones artísticas tenemos holgadas razones para demandar acciones oficiales de contención al sector.
Varias instituciones de nuestra provincia hemos presentado formalmente protocolos para el regreso a las actividades presenciales, solicitudes y propuestas de acciones desde octubre de 2020 a la fecha ante el Ministerio de Gobierno de la Provincia de La Pampa y las Secretarías de Trabajo y Cultura respectivamente. Para cada una de ellas hemos seguido el camino administrativo indicado, aportando nuestro estudio y profundización en las alternativas que nos permitan superar la problemática que nos agobia en estos momentos.
Muy poco ha sido el eco hallado, cuando no nulo.
Por ello, un conjunto de organizaciones populares pampeanas representantes de distintas disciplinas artísticas, algunas con extensa trayectoria en el campo social y cultural de nuestra provincia, hemos creado un espacio común para observar, proponer, interactuar y demandar por políticas públicas destinadas al sector. En virtud a ello solicitamos:
– La creación de un Consejo de Emergencia Cultural, integrado por representantes de las áreas de Cultura y Trabajo del Gobierno Provincial y de las organizaciones culturales constituidas con inscripción de DDPPJJ, con desempeño ad honorem.
– La constitución de una renta destinada a trabajadoras y trabajadores del arte por el tiempo que dure la emergencia sanitaria.
– La extensión de dicho aporte para quienes la actividad artística genera la mitad o más de sus ingresos.
– Considerando que los y las artistas ofrecemos al público un servicio conexo al arte que se constituye como un producto que tiene requerimientos específicos, solicitamos la aprobación o modificación de los protocolos presentados oportunamente para la habilitación de salas, teatros, espacios culturales, escuelas y academias vinculadas al sector artístico.
Comunicado de Prensa del 7 de Mayo de 2021 de las Organizaciones firmantes.
Asociación Pampeana de Danza (APaDa), Asociación Pampeana de Escritorxs (APE), Asociación Trabajadores del Teatro Pampeano (A.T.T.P.), Asociación Coral de La Pampa, Fundación Hop! Arriba el arte!, Músicos Independientes Piquenses Agrupados (M.I.P.A.), Músicas Autoconvocadas Pampeanas Unidas (M.A.P.U.), Movimiento Federal de Danza La Pampa.
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